El amor es de valientes 2.0

 Como he dicho en mi primera entrada de este blog,quería continuar con el tema,porque siento que es interesante tratar,siempre desde mi punto de vista como "Educadora social",pero antes como persona con sentimientos y con muchas emociones dentro de mí.

En mi primera columna semanal,en mi primera parte remarcaba los dos tipos de amor romántico que existen,pero hoy quería lanzar una pregunta:¿Quién nos enseña a querer o amar de verdad? Nos dejamos llevar por películas,series o,incluso,lo que nos impone la propia sociedad, percepciones totalmente falsas,que distorsionan la realidad.Se puede introducir en este tema perfectamente el tema de las apariencias o las etiquetas.

Aquí enlazo como ejemplo el día de San Valentín,en el que muchas parejas se dejan llevar por un día establecido por la sociedad,en el que nos queremos más que, por ejemplo,un tres de abril. Pasamos las historias y vemos como un chico le ha regalado a su novia un ramo de flores,o el anillo más caro y más bonito que has podido ver. No obstante,no vives dentro de esa relación,y no sabes bien si es una pareja sana,si uno de los dos se dedica a controlar al otro sistemáticamente y para hacerle sentir que no pasa nada y guardar apariencias se camufla en dos regalos o en guardar la apariencia por redes sociales.

Está claro que el amor romántico se aleja de todo eso. Nadie nos enseña a saber amar,quizá las experiencias,el haber tropezado con otras personas,siendo parte de tu aprendizaje y de tu formación como persona.

Pero considero que el amor se construye,día tras día,detalle tras detalle,y no me refiero a detalles materiales. 

Me refiero al hecho de estar ahí,demostrarle que le quieres,en vez de decírselo. Son características que salen propias cuando sientes algo muy fuerte por esa persona. Y es que está claro que el amor es una droga que nos tiene atontados,recurriendo a pensamientos,a una felicidad que no puedes evitar pero es un sentimiento precioso,que viene de repente sin esperarlo ni buscarlo,tan grande y tan fuerte que no se puede controlar. Es algo inefable,no cabe duda y también estoy segura que tú,que estás leyendo esto lo has sentido y vivido alguna vez.

Por último,cabe destacar igual que en mi anterior entrada el contrario del tema de hoy. Me refiero al desamor,un sentimiento muy difícil de explicar,muy triste,sentimiento al que nadie nos prepara.

Es algo con lo que desgraciadamente tienes que vivir,aprender a llevarlo de la mejor manera posible,también aprender a vivir por tí mismo como si esa persona nunca hubiera estado en tu vida.

Realmente me cuesta hablar de este sentimiento, porque es algo que no se puede explicar con palabras,pero estoy segura de que hablando de esto se os pasa una persona por la cabeza,una persona que has tenido que olvidar a la fuerza por tu propia salud mental.

El desamor va muy enlazado al tema de amor propio,al saber cuando no es ahí,al saber no forzar situaciones ni tampoco relaciones. Se nota muchísimo cuando es ahí,cuando tienes esa conexión,pero también cuando no lo es y tenemos que ser lo suficientemente maduros y tenernos siempre por delante para saber que,en esas situaciones,es mejor marcharse. 

Espero que os haya gustado mi continuación y muchas gracias por leerme;)nos vemos por aquí la semana que viene.